Porque a Boca lo quiero...
05.07.2012 03:04
El Xeneize se quedó sin el sueño de la Copa. Cayó con el Corinthians por 2 a 0 y no logró ganar la final. Ahora debe empezar a escribir una nueva historia. El hincha lo aplaude de pie

La historia puso a Boca en una final de Libertadores. La décima desde que se empezó a jugar la Copa. Lo colocó ahí porque fue mejor a sus rivales durante todo el trayecto de la edición 2012 pero en el último partido no logró superar al Corinthians. Se le escapó la final. La décima final de su historia después de haber ganado en seis oportunidades. Porque los números lo siguen poniendo en la cima de los equipos argentinos con títulos internacionales.
Boca no puede y ni debe caerse después de la derrota. Porque el juego tiene las reglas bien marcadas y uno de los dos debe perder. Esta vez le tocó al equipo de Falcioni, que estuvo impreciso y que no pudo ser contundente en el ataque. El partido fue de ida y vuelta pero los arqueros apenas participaron en un encuentro en el que prevalecieron los roces entre los jugadores y el juego sin claridad de ambos equipos.
Los hinchas viajaron hasta Brasil en caravana para alentar al conjunto que dirige el “Emperador”. Pintaron unas de las tribunas del Pacaembú de azul y amarillo, y fueron uno de los protagonistas de la noche, a pesar de haber sido maltratados por la policía brasileña en el ingreso al estadio. El presidente Daniel Angelici se quejó del lugar que le dieron a los simpatizantes y de la mala organización del Corinthians para la final. Todo quedará en la historia. Boca tiene que levantar cabeza y mirar para adelante porque el hincha lo alienta desde afuera y le pide que recupere las fuerzas para volver a empezar. Será el tiempo de la reflexión y el descanso. Una etapa sin fútbol para arrancar desde cero.